sábado, 3 de noviembre de 2018

Reseña: BOHEMIAN RHAPSODY, lo mejor de Queen sigue siendo su música

BOHEMIAN RHAPSODY, es un biopic acerca de la banda Queen, enfocándose especialmente en la vida de su cantante, Freddy Mercury, dirigida en parte por Bryan Singer (X-Men, Usual Suspects) y por Dexter Fletcher, debido a que el primero fue despedido a semanas de terminar la grabación, aún así la película no muestra tantos problemas como su errática producción, pero si deja algo que desear en ordinaria y fría manera de contar la historia de un hombre y una banda inigualables.


La narrativa de la película es muy básica, causando que lo que va pasando sea inocuo, esto se nota muchísimo en escenas donde para dar ese "drama" que busca debe hacer tomas de los personajes mirándose los unos a los otros sin decir una palabra, diciéndonos literalmente "¡miren que dramático!" en vez de hacer de manera natural. El film entero tiene un grado de mecanización fuerte, parece que le falta alma, un poco más de pasión por parte de todos, el problema es que mucha gente no unotará ésto después de los últimos 20 minutos de película donde sucede el highlight de la película, ese final es lo mejor por mucho y para varios eso sirve como la razón para verla y quererla aunque el resto sea mediocre. El sonido es impresionante en IMAX y es la única manera en la que recomendaría ir a verla, la música de Queen pocas veces se ha escuchado mejor, y actualmente no hace nada de daño poder revivir grandes éxitos de dicha banda de rock y aprovechar esos últimos minutos de la película que volverán locos a los fans de esta banda.

Rami Malek como Freddy Mercury es bueno a secas, durante partes de la película su personaje es plano, y al final le falta el magnetismo icónico del original, también la peluca que trae durante la primera mitad es un distractor fuerte y algunas de sus expresiones son demasiado exageradas, pero también es difícil imaginar a alguien que pudiera haber sido una mejor elección. También mención especial a Gwilym Lee como Brian May, quien tiene un parecido impresionante al real, y a Allen Leech como Paul Prenter, el personaje que gana el odio de la audiencia.

La película si fuera de otra banda que no fuera Queen no valdría la pena, pero esos últimos minutos causan una explosión de nostalgia en sus fans, también los fans más hardcore notarán algunos cambios en sucesos y línea del tiempo pero aún así la disfrutarán. Para mí no es una película sobresaliente, preferiría poner en mi casa el concierto de Live Aid que ver de nuevo esta película y por eso le daré 3★ de 5★ (PALOMERA), pero para los fans de Queen muy posiblemente sea un 5☆ de 5☆ y una película que los hará salir del cine extasiados.

Por: José Luis Santos

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