YO, TONYA (I, TONYA), es la película biográfica de la patinadora de hielo olímpica estadounidense Tonya Harding, estelarizada por Margot Robbie, con él apoyo de grandes actores de reparto y muy buena dirección.
La trama nos muestra la vida de Tonya Harding desde su infancia hasta lo sucedido después de volverse una de las personas más odiadas en Estados Unidos. La trama deportiva biográfica es algo que ya conocemos, pero esta historia es tan irreverente que rompe el esquema, siendo también una película con muchísima personalidad acompañada de excelentes personajes y excelentes actuaciones que causan risa, desesperación, y lágrimas. El paso que lleva es exacto, teniendo siempre algo inesperado en la siguiente escena, el formato de ida y vuelta entre la historia y las entrevistas de los personajes le da oportunidad a divertirse con las situaciones de manera natural, por ello el humor del film viene sólo y no es introducido a la fuerza como en muchas otras películas.
Las tomas están bien realizadas, logrando poner el toque emocionante en las escenas en las que patina Tonya, también tiene unas cuantas escenas en las que los personajes rompen la cuarta pared siguiendo todo esto de la identidad que tiene la película.
En música tenemos un soundtrack ochentero repleto de canciones que ya hemos escuchado antes en películas muy conocidas, una lástima sabiendo que no hubo cuatro canciones en esa época, pero pues al fin y al cabo son buenas canciones.
Las actuaciones son excelentes, Margot Robbie es digna del Oscar dándole vida a un personaje muy complicado, pero que a la vez se gana nuestros corazones, obviamente por momentos es difícil creer que tiene 16 o 20 años, pero su actuación brilla por encima de ello. Allison Janney es magnífica como la mamá de Tonya, siendo para mi la clara favorita a mejor actriz de reparto, su actuación no tiene punto de comparación con las demás nominadas, y es parte integral de esta película. Sebastian Stan interpreta a Jeff, el primer amor de Tonya, y desde su introducción en el film se vuelve elemental para él, sus interacciones con Tonya son parte del éxito de esta historia, por último, Shawn, el amigo de Jeff, interpretado por Paul Walter Hauser, es oro puro y el que más risas me sacó.
Este film fue una sorpresa para mi, no esperaba divertirme tanto en una película de este tipo, la historia nos demuestra que a veces la realidad supera a la ficción, y las actuaciones en conjunto son magníficas, 4★ de 5★ (QUIERO VERLA DE NUEVO), y es sin duda la recomendación de la semana.
Por: José Luis Santos
