ESO (IT), es una película basada en un libro de Stephen King, mismo que ya había sido adaptado para la pantalla chica hace 27 años causando traumas en los entonces pequeños, esta vez dejará traumas en pequeños y grandes por igual.
El film cuenta la historia de un grupo de niños que viven en un pueblo llamado Derry, éstos pequeños deciden investigar por su cuenta las múltiples desapariciones de otros niños en el pueblo, lo cual los lleva a enfrentar sus peores pesadillas al conocer al causante de dichas desapariciones, el payaso Pennywise. La película tiene un muy buen balance entre las secuencias de terror y el desarrollo del grupo de niños, ya que no deja que haya mucho de uno y nada del otro, lo cual hace que no falten los espantos mientras que los personajes logran hacer click con la audiencia. Las partes que se enfocan en los pequeños están llenas de humor y momentos los antecedentes necesarios para conocerlos, logrando una dinámica entre ellos y todo lo que sucede en Derry. Obviamente lo importante que deben preguntar es ¿da miedo?, y la respuesta es SI; la película tiene una porción razonable de sustos y espantos, pero lo que verdaderamente brilla son las imágenes sacadas de pesadillas que muestra a lo largo de la misma, dichas imágenes son producto de un excelente diseño de arte que provoca que exista un ambiente tétrico a lo largo del film, y eso es lo que a muchos les dejará una sensación extraña al salir de la sala (vi a muchos salir con cara de o_O).
Los efectos especiales son vitales para poder hacer realidad esas cosas tan torcidas y macabras, dejando impresiones que se quedarán un buen tiempo en las retinas de cada uno de sus espectadores; el film también se encuentra acompañado de una banda sonora que ayuda a exaltar el ambiente en escenas clave.
Cabe mencionar que pido aplausos para el señor Bill Skarsgard, quien es verdaderamente irreconocible en su papel, y quien tiene una actuación excelente y una magnífica presencia en pantalla, haciendo al payaso una de las partes que apuntalan la calidad de la película. El casting de los niños es preciso, y cada uno de ellos tiene una buena actuación, haciendo que el grupo de los Losers se sienta real y posible, con cada uno de ellos teniendo una personalidad completamente diferente al otro, formando un grupo variado con un matiz completo de cualidades, siendo los más destacados Finn Wolfhard (Richie), Jack Dylan Grazer (Eddie) y Sophia Lillis (Beverly).
Andy Muschietti sin duda aprendió de los errores de su trabajo anterior (Mamá) y logra el mejor film de horror del año y uno de los mejores de hace unos cuantos años para acá, trayendo a la vida una verdadera pesadilla, teniendo el honor de lograr 5★ de 5★ (DE LOS FAVORITAS), una película imperdible para los fans del horror y una experiencia que también los miedosos deben vivir, ya que vale la pena que les quite el sueño...
Por: José Luis Santos
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