KINGSMAN: EL CÍRCULO DORADO (KINGSMAN: THE GOLDEN CIRCLE), es la secuela de la ahora franquicia acerca de súper agentes secretos iniciada en 2014, la cual, fiel a su antecesora, tiene mucha imaginación y diversión, pero falla en varias cosas que fueron mucho mejores en la original.
La trama sigue a Eggsy y los Kingsman, quienes esta vez deben recuperarse del ataque de una organización criminal llamada el Círculo Dorado, y posteriormente tratar de desmantelar su plan macabro, lo cual los llevará a buscar recursos y formar nuevas alianzas. La historia es igual de loca que la primera película, pero también es un tema interesante que al final deja de qué hablar; el porcentaje de humor fue sin duda aumentado en esta secuela, lo cual no es malo ya que en verdad me sacó varias carcajadas, aunque hay dos chistes por ahí que caen en lo vulgar y podrían haberse hecho de diferente manera. La acción no decepciona con escenas de alto octanaje desde el primer momento, éstas están filmadas con una cámara dinámica que se mueve junto con lo que sucede, lo que puede hacer que algunos se pierdan durante la secuencia, pero es un estilo único que le da cierta personalidad al film, aunque está vez se siente como si no hubiera tanto peligro como debería, lo que hace a la última parte de la película algo decepcionante. Por momentos la película va demasiado rápido, lo que hace que haya cosas importantes que suceden, pero que no causan impacto porque ya quedó muy atrás en un lapso de 2 minutos, también esto hace que el villano tenga poco a nulo desarrollo, volviéndolo gris al punto al que uno de los secuaces se queda más en la memoria que su jefe.
Los efectos especiales son exagerados conforme al mismo estilo de la película, lo que puede no ser muy atractivo para algunos, pero cumplen su propósito. Durante las secuencias de acción, la música elegida funciona para aumentar el ímpetu de las mismas, haciendo que fluya la sangre en cada una.
En cuanto a actuaciones, hay que destacar a Taron Edgerton como el pilar central del film, quien hace que Eggsy sea compatible con toda la audiencia; Mark Strong (Merlín) y Edward Holcroft (Charlie), aparecen con una actuación muy sólida, dándole más importancia a sus personajes que la que deberían tener y causando un verdadero impacto en la película; Julianne Moore es muy olvidable en su actuación, y Colin Firth tampoco hace su mejor trabajo, lo cual afecta la película, y más aún si se compara con la anterior, ya que el villano y el personaje de Harry, son mucho mejores anteriormente; por último tenemos a los no mencionados quienes de igual manera podrían no haber estado en el film sin consecuencia alguna. (ojo, hay un músico reconocido que aparece en la película, mismo que se vuelve una de las mejores partes de la misma).
En general es una película muy divertida aunque tropiece en algunas cosas, mismas que para algunos no será notado entre las risas, por lo tanto un 3★ de 5★ (PALOMERA) se nota justo para esta divertida película, pero que con fallas notables, no llega a superar a la original.
Por: José Luis Santos
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