SICARIO 2: SOLDADO (SICARIO: DAY OF THE SOLDADO), es la secuela una de las mejores películas del 2015, misma que puso en escena la guerra contra el narco, dirigida por Denis Villeneuve (Arrival, Blade Runner 2049) y escrita por Taylor Sheridan (Wind River, Hell or High Water), esta vez quitando de la ecuación a Emily Blunt y a Villeneuve, y sustituyéndolos por la pequeña Isabela Moner, y el italiano Stefano Sollima, respectivamente, este cambio sí afecta a la película pero ahora les diré qué tanto.
A causa de un atentado terrorista en Estados Unidos, el gobierno de ese país llama al Matt Graver (Josh Brolin) quien, junto con su equipo, hará todo lo posible para llegar al fondo del asunto. Alrededor del 60-70% de la película es eléctrica, con un paso veloz de una secuencia de acción a la otra, lo malo de estas secuencias es que esta acción se siente muy artificial y en ningún momento llega a la tensión creada en la primera película, por más que el director italiano trata de tomar ciertas cosas directamente de la original, no tiene ese mismo toque maestro. El resto del film cae en un leve bache que contrastado al resto es notorio, la historia tampoco ayuda mucho, ya que está muy lejos del nivel de la primera, y pudo haber llegado a más, por último, el final es anticlimático y afecta la percepción del resto de la película. La banda sonora es un homenaje a la realizada por el difunto Jóhann Jóhannsson en la original, pero también termina quedando en un "downgrade" más. La manera en la que está filmada trata de conservar el estilo de la primera, ésto es algo bueno para la película, ya que ese estilo de tomas limpias sin un tilt espásmico en la cámara y acción con encuadre de plano general permiten que no nos perdamos nada de lo que el director quiere que veamos, aunque se siente la ausencia de esa cámara detrás del hombro que caracteriza a la escena del cruce de frontera de la primera.
Regresan para esta secuela, Josh Brolin y Benicio del Toro, ambos grandes actores y de quienes no tengo más que elogios en la mayoría de sus trabajos, siendo éste uno de los que entran en dicha mayoría. Incluso la pequeña Isabela Moner, de mala fama gracias a su participación en la última película Transformers, hace un trabajo correcto en la película. Eso sí, esta película no será recordada por alguna actuación sobresaliente, porque todos los personajes son muy fríos y no tienen diálogos o escenas en las que puedan destacar.
Otra secuela más en este año que falla en alcanzar el nivel puesto por la anterior, en un intento que no crea una película mala, pero tampoco una esencial, unas 3★ de 5★ (PALOMERA), lo que espero es que no se transforme en una franquicia que termine matando el legado de la primera.
Por: José Luis Santos
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